Ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos entran por ella. Evangelio de hoy.

  


En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

-No deis lo santo a los perros, ni les echéis vuestras perlas a los cerdos; las pisotearán y luego se volverán para destrozaros.

Tratad a los demás como queréis que ellos os traten; en esto consiste la ley y los profetas.

Entrad por la puerta estrecha.

Ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos entran por ellos.

¡Qué estrecha es la puerta y qué angosto el camino que lleva a la vida! Y pocos dan con ellos.

¡Palabra del Señor!


REFLEXIÓN PARA LA VIDA

Por: Gilberto Ballinas

Este día meditemos los versos del testimonial evangélico de San Mateo, que tiene un hermoso mensaje para nosotros.

Los versos del capítulo siete que hoy consideramos, forman parte del "Discurso Evangélico" que desea expresar el espíritu que caracteriza al Reino de Dios y a sus integrantes.

De manera específica, los versos expresan cómo deben relacionarse los hijos de Dios y con el prójimo: "Tratad a los demás como queréis que ellos os traten; en esto consiste la ley y los profetas"

Finalmente, en los versos 13 y 14 se manifiesta, ya, un exhorto por parte de Jesús, de ingresar al Reino decidiéndoce vivir fielmente la Palabra, en las obras mismas. 

¿Qué nos enseña hoy el evangelio? Nos invita a decidirnos a dejar de ser ciudadanos de la tierra y salir de la puerta amplia donde nos encontramos (dejando nuestra vida de mediocridad llena iniquidad y pecado ) y hacer una elección definitiva por Cristo y su Reino, para ingresar por la puerta angosta ( amando al prójimo como Cristo mismo nos ama). Muchos somos los bautizados que, tontamente, nos adentramos más y más en la puerta amplia de nuestra hipocrecia, viviendo desordenadamente una vida "farisaica", contraria al evangelio. Si por gracia de Dios aún estamos vivos ¿No es tiempo ya de dejar esa mala vida?

Pidamos al Señor que este día nos ayude a sensibilizarnos y a apartarnos del bullicio del mundo, para experimentar su amor y, así, decidirnos salir de la amplia puerta de nuestro egoísmo y vanagloria que nos llevará a la perdición y muerte eterna.

Comentarios